lunes, 10 de septiembre de 2007

Vía Celta: crónica.

Ayer me fui con un rollista a Villalba para asistir al cierre del festival Vía Celta de este año. Gracias a Dios y para nada gracias a mí, llegamos bien a nuestro destino, porque se suponía que era yo la que tenía que hacer de copiloto e indicar el camino (menos mal que él es un crack porque si tiene que fiarse de mí para llegar bien, ahora estaríamos en La Coruña xD).

Llegamos aproximadamente a eso de las 8 a Villalba, con muchas indicaciones de la gente del lugar, porque lo cierto es que eché de menos más señalización que informara a los visitantes de donde se celebraba la Vía Celta.
Tras aparcar 3 veces xD, llegamos al casco peatonal del pueblo. Allí había instalado un mercadillo celta, y me volví loca (me encantan los mercadillos temáticos, no lo puedo remediar :P). Por allí estuvimos paseando y viendo cositas, yo tuve que hacer un esfuerzo sobrehumano para mentalizarme de que no me lo podía llevar todo a casa, pero al final cedí porque cayó un marcapáginas (que los colecciono y ese tenía que ir pa la saca fijo xD), un anillo de madera con florecitas (muy mono, ya subiré foto) y algo más por ahí que no puedo desvelar aún (en su momento lo diré).
De modo que como yo tenía sed, nos sentamos en una terracita a tomar algo y desansar, para después ponernos a buscar donde estaba el parque Peñalba, que era donde se iba a celebrar el concierto de música celta. En un momento de lucidez se me ocurrió mirar en las marquesinas de los autobuses donde normalmente siempre suele haber un plano del pueblo, y lo había, pero indescifrable por culpa de un graffiti y por la acción del sol que había dejado el mapa descolorido.
Así que preguntamos a una señora que había en la parada y ella nos indicó. Acto seguido nos fuimos para allá, porque a pesar de que en el mercadillo celta se iba a hacer una queimada, yo preferí acercarme al parque para familiarizarme con el terreno y ya nos quedamos allí.
Un restaurante que estaba frente al escenario, hizo su agosto. La gente había ocupado todas las mesas de su terraza y como estaba dentro del mismo parque, todos los que estabamos allí congregados para acudir al espectáculo, compramos algo de beber en algun que otro momento.

Sobre las 22:00 apareció La santa compaña, grupo encargado del espectáculo, por la parte de detrás del restaurante. Había dos muchachas vestidas de blanco con antorchas que encabezaban y cerraban la comitiva de la santa compaña; en el centro, figuras encapuchadas vestidas de negro. Dejando a un lado el yuyu que me da a mí todo eso de los aparecidos y la noche de las ánimas, lo cierto es que estaba bastante bien logrado.
La comitiva espareció parque abajo para realizar algún que otro número con bengalas de colores que yo preferí perderme en favor de guardar el sitio que habíamos cogido, que no es que fuera la hostia pero ya que lo habíamos pillado cerca del escenario, preferí quedarme con esa ventaja. Un rato después regresaron abriéndose paso entre la gente con su marchar lento y su tenebrismo hasta que se subieron al escenario.


Lo que pensé que iba a ser un concierto no fue tal, porque al final resultó ser una actuación teatral amenizada por el grupo Pan de Capazo (que eran algunos de los que iban con túnicas negras); eso sí, con la noche, el fuego y la melodía de gaitas, tambores y flautas de fondo, se convirtió en un más que agradable espectáculo.
Debí suponerlo, era gratuito así que no se podía esperar mucho. Además los conciertos debían haber sido el viernes y el sábado porque para asistir a ellos había que pagar entrada, pero bueno, a mí me gustó bastante y no tuve la sensación de haber perdido el tiempo ni de decepción.
El año que viene intentaré asistir a algún concierto de los de pago porque me he quedado con la espinita de asistir a un concierto celta alguna vez en mi vida.
A ver si cuelgo un pequeño vídeo que grabé, en cuanto me entere de cómo se sube al tubo.

Por cierto rollista, no me has dicho todavía qué te debo de la gasofa, que lo sepas que no me olvido.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me alegra que lo hayas pasado bien, debió ser un espectáculo mágico, al que seguro que mereció la pena ir. Yo tambien tengo ganas de ir a otro concierto de musica celta, asi k a ver si coincidimos en alguno. Bsos x 1001