viernes, 20 de mayo de 2011

Últimos acontecimientos

Después de muchos días de encierro a lo ermitaño para dedicarme al estudio, por fin hemos tenido el tan temido primer examen del curso. 32 preguntas que esperábamos con miedo y que al final no han resultado ser tan espantosas como pensábamos. El lunes saldremos de dudas, mientras tanto procuro evitar pensar demasiado en el examen y las preguntas que he fallado, para poder disfrutar un poco del finde y relajarme.
Estoy cansadísima, tanto física como mentalmente. Es el primer examen que hago en 6 años de limbo y lo cierto es que me ha costado un poquillo absorber tantos conocimientos. Anoche me quedé hasta tarde estudiando las últimas hojas y esta mañana me levanté temprano para repasar desde el principio. Os prometo que la cabeza me pesaba y todo de la cantidad de cosas que tenía ahí dentro. Se nota cuando ya no tienes la cabeza hueca xD. De lo que me he dado cuenta, es de que si me pongo a recordar mis años de estudiante (estudiante más joven), me parece que por aquel entonces podía estudiar muchas más horas y muchas más hojas y no sentirme tan cansada como ahora. ¿Será la edad, será que he perdido la costumbre? no sé, pero ha habido momentos en los que el agobio me ha encogido el estómago. Antes de ir hoy a clase he tenido que tomarme una infusión relajante porque mi tensión estaba subiendo y no quería que me diera un telele.
En fin, que ya está hecho. A otra cosa mariposa.

...

Mi gemelo va ahí, ahí. Se ha quedado algo rígido y no se ha recuperado bien todavía. Me han mandado unas pruebas para ver qué pasa ahí dentro. También tengo que revisar mi salud general y he pedido un análisis de sangre para ver cómo va mi ferritina, mi anemia, mi tensión y mi estado de salud general. En las próximas semanas me toca volver a la rutina médica.
...

En la última semana, los acontecimientos que se están viviendo en la Puerta del Sol de Madrid, han logrado sobrecogerme. Me emociono hasta las lágrimas cuando veo que, si queda gente que logre este tipo de cosas, la humanidad todavía no está perdida y aún queda esperanza. Me emociona ver como la respuesta se ha ido extendiendo al resto del mundo, me emociona ver que todavía no ha muerto el espíritu de lucha por lo que uno cree, que tan sólo estaba adormecido. Y me sigue emocionando ver como el ser humano es la criatura más compleja y maravillosa de la creación: capaz de aniquilarlo todo en segundos, pero también capaz de construir cosas grandiosas.
De Madrid, qué voy a decir que no haya dicho ya... que cada día me siento más orgullosa de ser madrileña.

Lo que sí quiero dejar muy claro es que apoyo la concentración desde el punto de vista de "luchar por lo que uno cree y la defensa de sus derechos". No me amparo bajo ningún partido político ni me interesan esas mierdas, y cada vez que veo como políticos de uno y otro bando quieren atribuirse méritos de algo como lo que está ocurriendo, me dan ganas de vomitar. Tampoco estoy a favor de la violencia, ni los radicalismos incivilizados y mucho menos de no respetar ni la democracia ni las leyes.
Algunas de las reivindicaciones de la acampada de Sol no las comparto para nada, pero creo que toda la gente que está tomando las plazas de todo el mundo, está concentrándose de forma pacífica para proteger sus derechos, y nadie puede estar en contra de eso. Quizá peque de utópica, pero se me pone la piel de gallina cuando veo a jóvenes, parados, familias y jubilados unidos para defender una causa común. Sobre todo los tan vilipendiados jóvenes de la llamada generación ni-ni a quienes se acusaba de ser los responsables de un futuro patético para el país. Por suerte, han demostrado que realmente saben luchar por lo que quieren y probar que todavía queda esperanza para el país.
Ánimo Sol, estamos con vosotros aunque no podamos estar allí.

No hay comentarios: