jueves, 22 de septiembre de 2011

Banco de recuerdos

Siempre he pensado que lo más valioso que puede conservar una persona, son sus recuerdos. Dulces, amargos... todos ellos son importantes porque nos hacen darnos cuenta de cuánto hemos vivido, y muchas veces, consiguen rescatarnos del naufragio, pues basta con el fugaz paso de un recuerdo feliz por nuestra mente, para que volvamos a sonréir.
¿A qué viene todo esto? os preguntaréis. Pues bien, os lo contaré. Anoche vi un anuncio en la televisión que me ha hecho darle muchas vueltas al asunto. Se trata de este anuncio:



La verdad es que estoy muy concienciada sobre esta enfermedad. Me parece espantoso el sólo hecho de pensar cómo puede sentirse un enfermo de Alzheimer, ante la impotencia que supone ir perdiendo todos tus recuerdos hasta llegar al punto de no saber ni quien eres, sin que puedas hacer nada para evitarlo. Para ilustrar rescato este otro anuncio, que es uno de mis favoritos:




El impacto es brutal. No hay nada mejor que experimentar en uno mismo las cosas, para saber cómo se pueden sentir los demás. Bravísimo por la campaña de AFAL, creo que es buenísima. Ya me impactó cuando la vi por primera vez, y lo sigue haciendo cada vez que vuelvo a ver el vídeo. 


Volviendo a la idea del primer anuncio, es decir, del Banco de recuerdos, me parece también muy buena. Tanto que yo misma voy a dar ejemplo y a colaborar en esta campaña, donando uno de mis recuerdos para el banco, y evitar que se pierda en los abismos insondables del paso del tiempo. Y es que, me he dado cuenta de que algunas cosas solo viven gracias a que las recordamos. Así de importantes son los recuerdos, pueden seguir manteniendo vivo a alguien especial para nosotros, que ya no está en este mundo. ¿Qué pasaría si nosotros no pudiéramos recordar? se perderían tantas cosas, tantos sentimientos, tantas sonrisas, tantas alegrías...
Por eso, en pleno uso de mis facultades, dejo un recuerdo mío para la posteridad en el banco de recuerdos, así nunca se perderá, aunque yo llegara a no poder recordarlo. Llegada a ese punto, me gustaría leerlo y saber que alguna vez fue importante para mí.

Aquí dejo el enlace directo a mi cajoncito de recuerdos. (Wow, mi recuerdo hace el número 26.105 del banco, qué emocionante ver la cantidad de gente que ha sido capaz de donar algo tan íntimo como un recuerdo, para colaborar con la campaña. Increíble)

Si queréis donar un recuerdo, o apadrinar uno de los que ya han sido donados por otras personas, podréis hacerlo aquí. Yo, desde aquí, os animo a que donéis el vuestro :). Si preferís apadrinar un recuerdo, por una cantidad simbólica (1'20€) estaréis colaborando en la campaña de investigación contra el Alzheimer. Se puede hacer el apadrinamiento a través de un mensaje sms, pago electrónico o transferencia bancaria. Más información en la página web: http://www.bancoderecuerdos.es/

Gracias por haberme leído en esta ocasión importante, y gracias también por vuestra colaboración :).

Un saludo a todos.

Male.





P.D.: Me han comentado que el enlace a mi recuerdo no funciona. Si de todos modos queréis seguir viéndolo, podéis utilizar el buscador de recuerdos del Banco (abajo, en el centro, una pestaña con la letra B), sólo tenéis que poner mi nombre: Malena y el título: Recuerdo cuando... y ya está.


Gracias de nuevo por colaborar :).

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