Cuerda floja

Sí, ya sé que estoy caminando sobre una cuerda floja de espinas. Ya sé lo que me espera al otro lado y sé lo que pasará si caigo al vacío, y aún así, todavía no he abandonado porque tengo curiosidad de ver hasta donde llega esto; de ver hasta donde llegas tu.

Yo, a diferencia de ti, sé a lo que me enfrento, por eso voy a dejar que sigas interpretando tu papel, que sigas creyéndote a salvo. Voy a dejar que todavía sigas creyendo que no me he dado cuenta de nada y, mientras te enredas en tu propia red de mentiras, planearé con exquisito cuidado y dedicación mi triunfal y gloriosa venganza.

Ahora eres tu quien camina sobre la cuerda floja. Mide bien tus movimientos porque lo único que necesito para hacerte caer, es otro paso en falso más...