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I. Tengo mogollón de cosas acumuladas y muchas cosas que contar...

II. Este tiempo he estado de "vacaciones". Necesitaba una pausa por estrés y me he perdido un poco por ahí. Hubiera salido fuera en el punte de Mayo, a pasar 3 días con un amigo en un pueblo perdido de Zamora, donde ni siquiera hay tiendas. Pensaba llevarme mi réflex y recorrer el pueblo fotografiándolo mientras paseaba. Le pregunté si había iglesia al menos, me dijo que sí pero que se podía salir un día de turisteo por Zamora, ya que no está muy lejos. Y me pareció perfecto, porque Zamora es la única provincia de Castilla León que no conozco y me muero de ganas. Pero al final todos estos planes no pudieron ser, no me sentía en condiciones para salir de viaje, mi salud estaba bastante resentida y no lo consideré prudente. Queda aplazado para otra ocasión pues.

III. He pasado unos días de ansiedad horrible. Varias crisis que me han dejado físicamente agotada. Aparte, mi salud nunca ha sido buena, tengo mis cosas por ahí que regresan de vez en cuando para joderme. Sumemos la anemia, que se ha visto empeorada porque, tras 2 meses de ausencia, mi periodo ha vuelto dando guerra. Mis hormonas están revolucionadas y eso me revoluciona todo lo demás: sueño, descanso, tensión, jaquecas, ansiedad... círculo vicioso que se llama. En fin, quien tiene salud, no sabe lo que tiene.

IV. Siguiendo con el tema, mis problemas hormonales me han hecho darle muchas vueltas a un asunto últimamente: La congelación de óvulos y la maternidad en solitario. Si no fuera tan insultantemente caro, ya habría llevado a cabo la criogenización.
Me preocupa bastante, porque desde siempre supe que quería ser madre antes de morirme. Supe que quería ser madre, antes de saber que quería dedicarme a la enseñanza. Y estoy en una edad complicada, no sólo porque a los 32 se producen nada más que un 20% de óvulos sanos, sino también porque siempre quise ser madre antes de los 35. Mis posibilidades de concebir, se ven reducidas además por mi enfermedad de ovarios poliquísticos, y todo eso me produce mucha angustia y me hace darle muchas vueltas. Entiendo que ser madre soltera no es algo precisamente sencillo, y Dios sabe que yo siempre quise hacer las cosas como Dios manda, con familia tradicional y todo lo demás. Pero los años pasan, y mi reloj biológico avanza el doble de rápido. Sinceramente, ser madre es algo que deseo con todas mis fuerzas, y eso de "esperar al hombre adecuado" me viene sonando ya a utopía. Aparte de que no creo que haya nadie para mi, si se diera el milagro de que encontrara a alguien que se acercara a lo que considero mi media naranja, tendría que ir todo demasiado rápido, porque apenas tengo 2 años para ponerme a desarrollar toda mi planificación y conseguir ser madre antes de los 35. Eso, asustaría al más valiente, y sabiendo como son los hombres, creo que sería prácticamente imposible tener éxito en lo que busco.
Por otro lado, me da coraje tener que esperar por un hombre... ¿Esperar por un hombre, para qué?... ¿POR QUÉ?... ¿Por qué tendría yo que renunciar a mi más grande anhelo por esperar a alguien?... ¿Por qué anteponer un hombre a mi vida, esperando que para la otra persona sea el momento, cuando para mi ya lo fue desde hace tiempo?... cuanto más lo pienso, más absurdo me parece.
Y bueno, puede que yo sí quiera hacer las cosas bien, pero la vida me ha puesto en esta realidad, y tengo que asumir lo que tengo ahora. Esto es lo que hay, y esto es con lo que cuento. Tal vez llegue la persona o tal vez no, pero yo no puedo estar perdiendo más tiempo esperando a ver si se me aparece. Y eso de esperar es algo que he hecho durante toda mi miserable vida; pero ya, aparte de que estoy cansada, de que no me merece la pena esperar por los demás para construir mi felicidad, y de que sé que no vale la pena esperar por un hombre, mi tiempo apremia, y quiero cumplir mi anhelo más profundo.
Porque si sigo esperando, lo único que pasará será mi vida y mi reloj biológico se detendrá, y eso, es algo que juro que yo no podría soportar. He soportado muchas derrotas, pero esa acabaría conmigo.

V. Me ha entrado como un vértigo en el estómago al ver que ya hemos entrado en Mayo y el verano está a la vuelta de la esquina. Esa sensación cuando tomas conciencia de lo raudo que pasa el tiempo, me pone todavía más nerviosa. Hace nada estábamos empezando el año y ya estamos en verano... joder, cómo odio que el tiempo pase tan rápido, o quiza debería decir joder, cómo odio darme cuenta de que el tiempo pasa tan rápido...

VI. Cuanto más pienso en el fin de mi ultima "¿relación?", más cosas positivas le veo. Y eso es algo que me desconcierta, porque: a) nunca le había visto cosas positivas a pasar por una relación tortuosa, nada más que mi propio sufrimiento inútil. b) el hecho de ver más cosas positivas después de haber dado por finalizada dicha relación que estando en ella, me da que pensar... ¿en qué coño estaba pensando para seguir con esa tortura?
Tal vez sea esa la respuesta: que no pensaba, solo sentía. Y ahí es donde se confirma una vez más, que los sentimientos lo complican todo cuando nublan la razón. Ya lo dijo alguien "tus sentimientos te destruirán" y creo que no andaba muy equivocado...

VII. En estas ultimas semanas he estado intentando cumplir otro de mis puntos pendientes con la lista de Cosas que hacer antes de morir: Aprender a montar en bicicleta. Y no se me ocurría mejor momento que este, lo tengo todo: la bici, las ganas y a mi padre, que de entre todas las muchas cosas que ha sido en su vida, se encuentra la de reparador de bicis en su adolescencia. Pero ya contaré más cosas sobre esta aventura, porque le tengo dedicado un post sólo para ella.

VIII. Los sujetadores con copas preformadas me ponen de los nervios, son los primeros que uso y me hacen más tetas de las que tengo... y yo ya tengo bastantes. Podría preparar en ellas una perola de sopa para una decena de soldados...

IX. El sábado salí con mi hermano y mis primos a cenar y de fiesta post-cena. Lo pasamos muy bien, pese a que el tiempo no acompañó y la lluvia nos sorprendió en varias ocasiones. Llegué a casa empapada, con el frío en los huesos, con el pelo completamente encrespado y sin saber como desenredar esos nidos que se me habían liado ahí arriba. Cansada, algo shispilla (aunque todavía coordinaba bien) y con una risa tonta que no podía parar.
Momento memorable de la noche: yo mojando un pulpo en el mega cóctel de 2 litros que pedimos en grupo, para después comérmelo... (el pulpo era una golosina que nos regalaron con las consumiciones)
Comentario de mi hermano: -Estás borracha perdida ya xDDD seguido de un estallido de risas en grupo.
Es la mejor cura, deberíamos repetir más a menudo estas salidas.

X. Últimamente extraño mucho París. Había pensado en escribir este punto enteramente en francés, pero luego me di cuenta de que posiblemente no me iba a entender ni yo. Hace años que estuve y me gustaría volver de nuevo, aunque mi francés está más que desentrenado. Pienso que si tuviera la suerte de encontrar uno de esos chollos de la red, donde el viaje en avión Madrid-París, me sale más barato que quedarme en casa el fin de semana, no me lo pensaba dos veces. Mientras, aliviano mi nostalgia con Edith Piaf, con la película de su vida (la cual he visto ya, y me gustó), con el re-visionado de la película Amelie, con las imágenes de París del Tumblr de Imaginaryenemy (al que soy adicta), y con el visionado una y otra vez de mis fotos de París...

Ahhhhhhh Paguíiii... c'est magnifique!!!!